En la actualidad, la Bolsa de Productos permite a los agricultores que puedan liquidar sus facturas de ventas con un costo significativamente menor que el ofrecido por los factoring bancarios. 

También están los contratos REPOS que permiten vender con el compromiso de volver a comprar la producción, definido como Retrocompra.

Muchos productores desconocen lo anterior, por lo cual les sugiero revisar estas alternativas de financiamiento.

Pero la potencialidad de la Bolsa es mucho más de lo que podemos imaginar. Ya han habido algunas transacciones de ganado pero no muy significativas y la explicación a las pocas transacciones, son el desconocimiento generalizado tanto de su existencia como de las posibles opciones comerciales para la cual fue creada, que si pueden beneficiar al sector agroproductivo. 

Dentro de los productos que hoy se pueden transar, a parte de los agropecuarios, están los forestales, los acuícola  como los salmones, insumos como los fertilizantes  y los de energía. 

El ministerio de Agricultura está muy interesado en posicionar a la bolsa de productos en las transacciones de seguros de precio, para que los productores tengan la seguridad respaldada, a través de un contrato, del precio que recibirán por su cosecha con bastante anticipación y no como ocurre en la actualidad que, para muchos, es un misterio que no se resuelve hasta el día de la venta.

Cada producto a transar en bolsa  está definido y estandarizado en los llamados padrones, que vienen a definir las características que el producto debe tener para ser transado en la Bolsa de Productos. 

En estos momentos, en que la tasa de interés bancaria está alta y  ya que los bancos aplican la mayor tasa posible a  los créditos sectoriales, no está demás que los productores exploren alternativas diferentes al financiamiento bancario el cual puede ser a través de la Bolsa de Productos y que podría a más de algún productor sorprender favorablemente. 

Jorge Neira, Economista Agrario

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